5 tendencias de consumo para América Latina en 2016

 5 tendencias de consumo para América Latina en 2016

2015 fue un periodo de desafíos políticos, económicos y sociales para América Latina. Pero aunque el contexto podría complicarse, puede traer grandes oportunidades para las marcas. Esa es la visión de Trend Watching, que refleja en su reporte «5 Latin Consumer Trends for 2016».

El estudio presenta cinco tendencias que primarán en la región en este año y que, de ser asimiladas por las marcas, pueden ser aprovechadas para crear grandes experiencias para los consumidores.

1. Inmigración

Con la llegada de nuevas personas, la integración se vuelve un asunto importante en 2016.

La compleja crisis de los refugiados en Europa también impactó en América Latina. Las historias de quienes dejaron su país bajo terribles circunstancias despertaron la hospitalidad en la región y muchos ciudadanos se han unido para crear proyectos en la región con el fin de recibir refugiados.

Esto es parte de un cuadro más grande, la región ha aumentado el número de inmigrantes en los últimos años. Y, como resultado, se ha vuelto más diversa; aumentando la tolerancia hacia la diversidad.

¿Qué oportunidad pueden ver las marcas en este contexto? En 2016, la integración es la palabra clave para la región.

Los negocios que promueven nuevos encuentros y sirven las necesidades de los newcomers así como de quienes buscan darles la bienvenida, se ganarán el amor de muchos consumidores América del Sur y Central.

2. Aventureros urbanos

En 2016, los latinos acogen nuevas formas de transporte urbano.

La urbanización se acelera en América Latina más rápido que en cualquier otra parte del mundo. Con más personas viviendo en ciudades, hay más oportunidades, elecciones y experimentación.

Esto implica también mayor inversión en infraestructura, incluyendo vías y otras formas de transporte. Es así, que muchas personas están yendo más allá del auto.

Entonces, en 2016 las marcas pueden ayudar a los consumidores a encontrar nuevas, más rápidas, más seguras y accesibles maneras de moverse dentro de sus ciudades.

3. Fin de la espera

Los profesionales de América Latina, de clase media, están experimentando mayores ingresos, jornadas más largas de trabajo y una explosión en las decisiones de consumo disponibles para ellos. El resultado: los consumidores de la región nunca se han sentido más presionados por el tiempo.

En 2016, los consumidores buscarán nuevas maneras de empoderarse de sus vidas.

Las marcas deben tener como prioridad estar ahí cuando los consumidores lo necesiten, ofreciendo servicios al toque de un botón y reduciendo sus tiempos de espera a cero.

4. Intercambios valiosos

Los latinos son fanáticos de las redes sociales: un estudio de Datanalisis indica que un 89% de los latinoamericanos utilizan Facebook. A través de las redes, los consumidores interiorizaron que la interacción es posible en cualquier momento, con cualquier persona y marca. Ahora, quieren más que hablar.

Este año, los consumidores latinos buscarán llevar sus interacciones con las marcas a otro nivel. Esto significa que participarán activamente en valiosos intercambios que son útiles, divertidos y, además, podrían ayudar a resolver algunos problemas globales.

Incrementar la conciencia de problemas sociales y ambientales significa que muchos están dispuestos a cooperar con las marcas con el fin de servir a un propósito superior.

5. Masas organizadas

Según la International Labour Organization (ILO), las micro y pequeñas empresas son el motor de la generación de empleo en América Latina y El Caribe.

En los últimos 10 años, América Latina vivió un gran crecimiento de este tipo de negocios. Los trabajadores que fueron una vez empleados de grandes compañías, empezaron sus propios negocios y muchos de ellos ingresaron a la economía informal. Esto creó una gran red de servicios, que muchas veces es poco visible a un gran número de consumidores.

La oportunidad para las marcas radica en ayudar a los consumidores a encontrar pequeños negocios que pueden ayudar a llenar sus necesidades. Así como proveer de plataformas que permitan a los consumidores a criticar, medir e incrementar la confianza en esos negocios.

 

Thalie Ponce

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